En el banco mundial trabaja gente de todo el mundo, literalmente. Por ejemplo, el otro día un tipo argentino con el que almorcé me contó que entre sus conocidos había 6 personas de las Islas Mauricio. Sacábamos la cuenta que eso representa un porcentaje no menor de dicho país (o por lo menos de aquello mauritanos que viven fuera de su isla).
El hecho de que haya tanta gente de todos lados hace que existan estos comedores como les describí con comidas de distintos lugares del mundo, que se escuchen muchos idiomas y que en estas fechas el banco este prácticamente vacío.
Aún cuando no tenemos vacaciones oficialmente, ni Winter break, el 26 de diciembre y 2 de enero se nos dio libre. Con esto muchos extranjeros aprovecharon estas fechas para irse a sus tierras. Esto sumado al hecho que para la gente de planta (yo no, yo soy la cuasi escoria del banco en términos contractuales, tal vez la escoria) por cada mes trabajado se le dan dos días de vacaciones hizo que el banco pareciera la semana pasada y probablemente la que está por venir como un pueblo fantasma.
Lamentablemente, como llevo pocos días y no tengo plata para costearme un viaje a Santiago aun me tengo que quedar trabajando…
Aprovecho esta entrada en el blog para contarles un par de cosas más. Lo primero es contarles de los paseos caminando por el centro de DC. La ciudad es realmente linda. Caminar por la Pennsylvania Avenue entre el Fondo Monetario Internacional y el Capitolio es precioso. Te encuentras con el edificio del FBI, la antigua oficina postal, el departamento del Tesoro y una casa que es blanca. Eso que estoy dejando de lado muchas otras atracciones.
Cuando llegas al capitolio (que es mi edificio favorito arquitectónicamente hablando de DC) te das vuelta y puedes ver todo el mall con los museos del Smithsonian. Estos museos son todos gratis (por eso he ido po, si yo no soy tan culto como pa pagar…) y hay de todo. El de aire y el espacio, artes, historia. Además al final se ven los monumentos a Washington y el Lincoln Memorial. Es muy entretenido ese paseo por el centro de DC, me imagino que con unos 10°C más debe ser mucho mejor.
Lo otro que les quería comentar es una reflexión. No una reflexión de navidad ni de nada de esa onda po, si soy yo el que escribe y he estado fuera 20 días, sigo siendo el mismo gil inmaduro. La reflexión tiene que ver con los idiomas que escucho en la calle y en el metro. Escucho mucho español. Incluso más que inglés.
Esto me lleva a pensar en dos posibles explicaciones a ¿por qué escucho más español que inglés en la calle y metro? La primera es que tengo mi oído más sensible al español ya que es el idioma que he escuchado toda mi vida. La segunda, que somos los latinos los que tenemos que andar en metro y en la calle cagados de frío porque los gringos andan en auto… Juzguen ustedes cual será la más posible.